El contrato en una mudanza es, a la vez, una obligación y una responsabilidad. Da igual que desees cambiar de hogar o de oficina, hacerlo sin firmar un documento de este tipo es un tremendo error que no nos podemos permitir. Es la manera de hacer las cosas de una manera legal y que tanto profesionales como particulares estén cubiertos en caso de que surja algún contratiempo.
El contrato en una mudanza es básicamente un documento en el que las dos partes se comprometen a cumplir lo pactado. Principalmente que la empresa (el porteador) tiene la obligación de transportar el mobiliario, enseres y otros complementos de una ubicación a la nueva. En este documento, se detalla también si la empresa está encargada de la carga y descarga o de depositarlo en el interior de la vivienda.
Además, en un contrato es posible incluir otros aspectos fundamentales, como quién debe realizar el embalaje, el montaje o el desmontaje del mobiliario. Del mismo modo, en el documento se deben establecer los distintos derechos y responsabilidades de ambas partes, tanto de la empresa de traslados como del cliente.
En ocasiones, tenemos que elegir entre ahorrar dinero o hacer las cosas como se deben hacer y contratar un buen servicio de transporte. Si buscas seguridad para tus pertenencias y protección ante cualquier posible contingencia, no dudes ni por un instante apostar por la vía legal y firmar este documento.
Eso sí, el contrato en una mudanza tiene que cumplir con varios requisitos que a continuación te resumimos:
Adana Transportes, especialistas en mudanzas rápidas, tranquilas y eficientes para oficinas y particulares.